Son muchas las familias y profesorado que me pregunta qué se puede hacer con el alumnado que habla muy bajito, que casi no interviene en el aula y que cuesta mucho entenderle cuando lo hace, encontrándonos con momentos en los que justamente por no entenderlos, se enfadan, se frustran, consiguiendo que intervengan menos todavía.
En un principio, habría que descartar trastornos neuronales, como podría ser la disartría, en la que se observarían aspectos como:
- Arrastrar o barrer las palabras al hablar
- Hablar entre dientes, moviendo la lengua, pero no la mandíbula
- Emitir voz muy baja, como un susurro
- Mover la boca con lentitud al hablar, o tan rápido que no se entienda
- Entonar con un ritmo o acento distinto al de su entorno
- Poca movilidad de la lengua, labios o mandíbula
- «Flojera» para masticar y tragar
- Voz muy nasal o muy aguda
- Ronquera
- Voz entrecortada, como con asma, o dificultad para respirar mientras habla
- Babeo excesivo o escaso control de la saliva
Podría haber dificultades auditivas, baja capacidad pulmonar, trastorno en el aparto vocal, … o se podría deber a una carácterística de la personalidad. Tanto si es por dificultades físicas o psíquicas, pueden existir soluciones. Para las dificultades físicas, es importante que el diagnóstico sea preciso para realizar un tratamiento adecuado . Respecto a las psíquicas, existen miles de actividades que podemos realizar trabajando y desarrollando distintos aspectos.
En esta entrada, nos centraremos en los aspectos que tengan que ver con la personalidad, ya que lo médico, se escapa de nuestro área educativo. Ante niños/as que son muy tímidos, sería necesario trabajar la autoestima y el autoconcepto, para que vayan sintiendo cada vez más seguirdad en sí mismos, alentando sus logros y relativizando sus errores llegando a valorarlos positivamente.
Es importante respetar como es cada uno, sin criticarle, ni etiquetarle, ni señalarle.
Hay que darle oportunidades de socialización, para que se pueda poner a prueba, para que afronte sus inseguridades y venza sus miedos, siempre con la figura del adulto cerca para que le de confianza y seguridad.
Es importante no forzarles, que se enfrenten a situaciones de la manera más natural posible, mediando el adulto cuando sea necesario para facilitar el contacto social y que no resulte «traumático», además, el hecho de que el adulto «ponga palabras en la boca del niño/a» servirá de modelo que irá interiorizando y que le facilitará la expresión en un futuro. No forzarles, no debe confundirse con sobreprotección ya que conseguiremos que ciertamente se sienta que no puede afrontar la vida real.
Debemos de favorecer la autonomía, la responsabilidad, la toma de decisiones, … para eso, hay mucho de lo que hablar, pactar, llegar a acuerdos, … y es algo imprescindible para un desarrollo positivo de la personalidad.
Demos de favorecer que se exprese de todas las formas posibles. Para ello, podemos basarnos en sus aficiones, servir nosotros como ejemplo en situaciones sociales y realizar actividades lúdicas que favorezcan este aspecto. Para ello, os propongo una cuantas:
- JUEGO DE ROLES Y DRAMATIZACIÓN.
Le permite tomar el papel de otra persona con características impropias de él, observa otras maneras de actual y facilita la improvisación y por tanto la creatividad.
2. DADOS PARA CONTAR HISTORIAS
Favorecen la expresión a todos los niveles del lenguaje, la fantasía, la creatividad, la imaginación, …
3. CANCIONES, RIMAS, TRABALENGUAS, VEO-VEO, ONOMATOPEYAS, …
Todos los juegos en los que la expresión oral medie, son muy enriquecedores, además de divertidos. Podemos jugar con los registros de la voz, el volumen, …
4. LA LECTURA Y LOS LIBROS.
La lectura nos permite trabajar muchísimas cosas. Hay libros que permiten proyectar sombras (para trabajar el miedo a la oscuridad por ejemplo), libros que trabajan distintas temáticas (miedos, autoestima, valores, …), … a través de los personajes podemos jugar, dramatizar, reir, llorar, gritar, … es importante un rato diario de lectura conjunta, en la que, tanto niño/a como adulto participen de manera conjuta, comente, relabore, saque conclusiones, hable con y como los personajes, … en definitiva, que disfruten de manera conjunta de un momento mágico.
5. JUEGOS COMERCIALES.
Existen diferentes tipos de juegos, que se pueden comprar y que facilitan la expresión oral. Tipo al ¿quién es quién?, ¿en qué trabajo?, juegos de seguir instrucciones, …