Lenguaje del niño 24-36 meses: fase de conclusión
Entre los 24 y los 36 meses, el niño ya usa nombres, verbos, artículos y pronombres en secuencia lógica, para formar frases como: “Yo cojo el osito y le doy la papilla”.
Para favorecer la consolidación de las facultades lingüísticas del niño, es fundamental que el pequeño pueda interactuar con otros niños. El dibujo, la expresión gráfica y el hábito de dialogar en familia pueden ayudarle a afinar su capacidad de comunicación.
No hay que preocuparse si el niño tiene un pequeño retraso de pronunciación relacionado con algún fonema complejo, como “gl” o “ñ”, porque lo adquirirá más adelante, a partir de los cuatro años.
Por el contrario, hay que prestar atención si su vocabulario no se desarrolla y si no aparece la capacidad de construir frases muy sencillas, como “dame la pelota”. También en este caso, es conveniente dirigirse al pediatra, quien valorará la necesidad de llevar al pequeño a unespecialista del habla.